domingo, 17 de mayo de 2009

ACERCA DEL DESASTRE ECONÓMICO


Respecto a la carta pública (2-IX-08) de Mons. Fernando Sebastián Aguilar acerca del retiro de dinero y deudas en la Asociación, las mismas Administradoras aclararon su gestión en septiembre de 2008. Las pruebas demuestran la disminución de estos fondos como consecuencia de los cargos domiciliados que van llegando a las cuentas a lo largo del mes y que corresponden a gastos ordinarios (desde gastos de suministros hasta sueldos y obligaciones hipotecarias), nada extraño para una persona sensata en pleno siglo XXI y dada la magnitud de esta Obra. Respecto a los números rojos, al cierre de julio de 2008, el total de las cuentas que lleva la Asociación arrojaba un saldo positivo. La deuda de seis millones de euros no fue adquirida en los últimos tres años, es el resultado de la gestión administrativa de una deuda de tres periodos administrativos distintos que se va incrementando paulatinamente según lo requiere el crecimiento de la Obra. Actualmente un 77 por ciento de las deudas provienen de la adquisición de bienes capitalizables que, lejos de aminorar el patrimonio de la Institución, lo favorecen, y posibilitan el crecimiento de las actividades apostólicas de la Obra. Por otra parte es una deuda que se va amortizando en el tiempo y las cuotas iban siendo pagadas. A partir de la gestión del Sr. Comisario (agosto del 2008) esta deuda ha ido aumentando indiscriminadamente, haciendo casi imposible en la actualidad su amortización.

Ya al final de esta carta, declaramos que todas las afirmaciones a lo largo del presente escrito están amparadas documentalmente.

Volvemos a lamentar la desacertada injerencia de una persona ajena completamente al asunto en el que la Iglesia ya ha intervenido con un dictamen. Aún seguimos sin comprender el sentido de esta carta… ¿Qué servicio presta a la Iglesia? ¿Contribuye a la mayor Gloria de Dios?

Continúa en el siguiente artículo...

No hay comentarios: